Como hemos visto en otras ocasiones, existen diferentes tipos de sofá en el mercado. Algunos son más conocidos que otros, aunque todos ellos se utilizan para prácticamente lo mismo. En esta ocasión te hablaremos sobre el sofá diván, su historia, características, y los lugares habituales para colocarlo.
¿En qué consiste un sofá diván?
Es importante destacar que el estilo diván abarca asientos, sofás y camas, sin embargo, en este artículo nos enfocaremos exclusivamente en los sofás. En este sentido, un sofá diván es un sofá que no tiene respaldo ni costados.
Características
Lo podemos encontrar en dos o en una sola pieza, y con reposabrazos, similar a un sofá tradicional. Una base de diván que se asienta en el suelo es una característica particular en varios tipos de divanes.
Esto podría ser un marco de metal o madera con un zócalo alrededor. Algunos de estos sofás diván también cuentan con ruedas, mientras que otros tienen patas de sofá tradicionales.
Este tipo de sofás normalmente tienen la misma longitud que un sofá de dos plazas o love seat. Si bien es común en algunos sofás cama incluir almacenamiento debajo, un sofá diván solo puede tener esa característica si el almacenamiento está debajo de los cojines del asiento.
Los asientos de un sofá diván son más cortos que los sofás de dos plazas y solo pueden acomodar cómodamente a una persona. Estos divanes suelen estar disponibles con cenefas de colores a juego, lo que le permite combinar el diván con el resto de la decoración de tu sala de estar.
Otra de las características del sofá diván tiene que ver con su altura respecto a otros sofás. Esto se debe a que normalmente mide entre 30 y 32 pulgadas de alto, mientras que otros sofás miden alrededor de 36 pulgadas de altura. Muchas veces se le considera una cama otomana porque su longitud varía de 45 a 51 pulgadas, y su profundidad suele ser de alrededor de 43 pulgadas.
Historia del diván
Los orígenes del sofá diván se remontan a épocas antiguas en Turquía y Persia, donde el diván se convirtió en un asiento en las oficinas gubernamentales. Dado que es un tipo de mueble que existe desde la Edad Media, en realidad nadie sabe quién lo inventó el sofá diván. Lo que sí se sabe es que entre los años 1400 y 1500, el diván se puso de moda, siendo los divanes turcos la cúspide del lujo.
Sigmund Freud, el padre de la psicología moderna, y su afición a los sofás divanes originaron el famoso chiste del sofá del psiquiatra. Lo cierto es que en realidad ocurrió. Freud empleó un sofá diván en lugar de sillas para instar a sus pacientes a reclinarse y relajarse en lugar de permanecer sentados durante toda la sesión. Freud entendió que para abrirse y contar sus asuntos personales, los pacientes necesitaban relajarse y confiar.
Madame Benvenisit, una de sus pacientes, le regaló su primer sofá diván. Con el paso del tiempo, este tipo de sofá se hizo conocido como un sofá terapéutico. De hecho, desde la década de 1940 y hasta principios de la década de 1960, se volvió uno de los muebles más populares.
¿Dónde se puede colocar un sofá diván?
Se puede usar un sofá diván para embellecer cualquier espacio, incluidos la sala de estar, el comedor y el vestíbulo. Estos sofás son excelentes para un descanso rápido, como cuando te pones botas para la nieve. Si bien no están diseñados para acurrucarse con un libro, un sofá diván más largo se puede usar para eso precisamente cuando no tienes prisa.
Incluso un sofá diván de dos plazas se puede usar como sofá cama para un niño pequeño. Como tal, son un tipo de sofá que se pueden colocar en la sala de estar, el comedor, la biblioteca, la terraza, en la zona del vestidor, el tocador o el dormitorio, siempre que se coloquen contra la pared.
Por otro lado, un sofá diván se puede utilizar para complementar cualquier decoración moderna. Lo podemos colocar tanto en áreas pequeñas como grandes. De hecho, con frecuencia se les puede ver en los museos, donde se utilizan para ofrecer a los clientes un lugar para sentarse y reflexionar sobre una obra de arte durante unos segundos.
También se sabe que son una pieza popular entre los diseñadores de interiores, ya que se puede utilizar de diversas formas. No cierra los espacios porque tiene dos lados abiertos. Se puede colocar en cualquier lugar de la habitación, sin embargo, se usa más comúnmente contra una pared.
Sin embargo, en lugares públicos, se colocaría un sofá diván en un vestíbulo o un gran salón, en el centro de la habitación o en una posición designada. El diván es el único mueble que se puede utilizar como sofá tradicional, o sofá de dos plazas y, al mismo tiempo, como sofá cama para relajarse. Vienen en una variedad de estilos y se pueden diseñar para adaptarse a casi cualquier tipo de decoración.
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