Piénsalo bien, ¿hay un mueble más sufrido en casa que el sofá? Lo usamos diariamente; nos tumbamos en él, comemos, recibimos a las visitas, jugamos con los niños… ¡hasta las mascotas lo utilizan para su siesta! Y ni siquiera lo limpiamos a fondo muy a menudo. Hasta que llega un día en el que nos decidimos a dar el paso, ¡necesitamos cambiar de sofá! En este artículo te contamos algunas señales inequívocas que indican que tu sofá pide a gritos una jubilación. Y ya que estás dispuesto a comprar uno nuevo, decídete por la calidad y el confort que ofrecen los modelos de fabricación nacional de Fabriksofá. ¡Siempre al mejor precio!
Señal nº1: El sofá te engulle
Al principio te hace hasta gracia, pero cuando llevas más de cinco minutos sentado tu espalda comienza a quejarse de tan gratuita agresión a su verticalidad. Un sofá hundido es incómodo. De hecho, muy incómodo, además de perjudicial para nuestra integridad física. Esto se produce debido a la rotura de alguno de los travesaños del armazón o al desgaste de los cojines, cuyo relleno se ha perdido o apelmazado con el tiempo y la ley de la gravedad. En este punto, las chapuzas y parches duran lo mínimo y el sofá seguirá siendo incómodo. Sin duda, el signo más evidente y alarmante para que cambies de sofá.
Señal nº2: Los colores ya no son lo que eran
Suele ocurrir. Cuando compras un sofá blanco que destella ante tus ojos y luego pasa a ser gris, o te decantas por un fantástico estampado beige que se convierte en marrón sucio. La pérdida de color a causa del tiempo, la suciedad acumulada o los lavados, es un signo evidente de que tu sofá necesita un cambio inmediato para volver a dar vida a tu salón.
Señal nº3: La familia crece
Esta señal no está estrechamente relacionada con el sofá, pero es una de las más evidentes a la hora de tomar la decisión. Si cada vez sois más personas en casa y os peleáis por un rinconcito del sofá a la hora de ver la serie, tenéis que cortar por lo sano, ir a Fabriksofá y decantarse por un chaise longue o una rinconera espaciosa donde disfrutar, todos juntos, de siestas sin fin.
Señal nº4: Las manchas se multiplican
Seguro que recuerdas la primera mancha que hiciste al sofá. Las que vinieron después fue como escuchar el agua caer. Hasta que te das cuenta que el tapizado de tu sofá está más estampado que un perro dálmata y que, por mucho que frotes, la mancha se ha quedado a vivir en el tejido. Cuando vayas a comprar tu nuevo sofá a Fabriksofá, no olvides preguntar a nuestros asesores por los tapizados antimanchas que tenemos disponibles en todos los modelos; lo agradecerás con el tiempo.
Señal nº5: La decoración de tu hogar evoluciona, el sofá no
Cada cierto tiempo cambiamos las cortinas, las alfombra, los cuadros, los cojines… Pero, ¿y qué pasa con el sofá? Es el elemento central de nuestro salón, no solo por el tiempo que lo usamos, sino también por su impacto visual. Es el que determina y marca la tendencia decorativa del salón. Por lo que, si queremos dar un nuevo aire al hogar, ¡comienza por el sofá! En Fabriksofá los tenemos de todos los estilos; clásicos, modernos, funcionales…
Ahora que ya tienes claro que tu sofá necesita un cambio, es el momento de que visites Fabriksofá. Además, te llevamos el modelo que elijas totalmente gratis y retiramos el viejo. Más facilidades imposible… Bueno, sí, ¡te lo financiamos hasta en 24 meses! Descubre todos los modelos en la web.
